Ley de equivalencias

Tal como la alquimia dictaba en sus leyes de equivalencias, para ganar algo hay que perder otra cosa, de la misma forma que en los principios físicos: la materia no muere, sólo se transforma.

Bueno, hoy me he dado cuenta de algunas cosas que he perdido en pos de mis victorias... y me dolió. Me he percatado de que perdí mi identidad dentro de mi familia. Si bien ahora estoy en paz conmigo misma, junto a ellos me siento como una extraña.

Supongo que ellos se han visto "traicionados" por mí, por mi forma de pensar tan distinta a la de ellos... pero yo no puedo entenderlo ¡se supone que estoy creciendo, no podía hacer lo que ellos querían toda la vida! Y duele, de verdad que sí. Da mucha pena ver que un vínculo tan fuerte se haya debilitado tan rápido.

Cuando era chica creía tener una familia perfecta, pero a medida de que crecía y encontraba esos feos recovecos en ella... poco me importaban, pero a ellos sí les importan y molestan mis diferencias.

Lo más triste es que nos queremos, y porque nos queremos terminamos dañándonos aún más.

Mis papás me creen una irresponsable, una floja, y en cierto sentido tienen razón. La gran mayoría de las veces peco de floja, pero ¡no entiendo por qué chucha me tengo que levantar a las 10 de la mañana los sábados! Y sí, soy una irresponsable de mierda, pero cada vez que me comprometo en algo (me guste o no), pongo todo de mi parte para hacerlo bien.

Tengo pena, pero tengo más rabia... y esa molestia constante y ascendente contra mi familia ya no me está dejando pensar con claridad. Odio llegar a mi casa después de clases porque sé que vamos a pelearnos toda la tarde, pero lo que más odio es que mis papás finjan tener una familia feliz cuando no puede estar más rota.

Bueno, quizás el rota es muy exagerado... pero creo que tenemos algunas diferencias que son irreconciliables, y eso nos daña a todos.

No quiero una familia perfecta ¡qué horror, no gracias! pero sí quiero encontrar en ella un apoyo a mis proyectos, y que ellos vean en mí a alguien que, aunque no la vean interesada o tan comprometida como les gustaría, está orgullosa de tenerlos a los tres (incluso, con el imbécil de mi hermano incluido).